La hiperplasia benigna de próstata es el crecimiento benigno de la glándula prostática. La mayoría de los varones mayores de 70 años la pueden padecer. La HBP produce una obstrucción del conducto de la orina por lo que la vejiga se almacena de orina de manera extraordinaria. Supone un dolor fuerte a la hora de miccionar.
A pesar de que la próstata aumenta de tamaño no se trata de un cáncer y a través de un procedimiento quirúrgico puede redimensionarse a un tamaño normal. Previamente a una intervención, es necesario un tratamiento farmacológico que el profesional sanitario administrará a cada varón según sus necesidades. Aunque la HBP no es un factor de riesgo del desarrollo del cáncer de próstata, es importante detectar el agrandamiento a tiempo para prevenir complicaciones y mejorar la calidad de vida.
Los síntomas comunes de la hiperplasia benigna de próstata (HPB) incluyen:
- un chorro débil o interrumpido durante la micción,
- goteo incontrolable después de terminar de orinar,
- un aumento en la frecuencia de visitas al baño,
- sensación de no vaciar completamente la vejiga
- y dificultad para iniciar el flujo de orina.
Las causas de la hiperplasia benigna de próstata son:
- Envejecimiento. Es preponderante en personas de edad avanzada
- Durante esta etapa vital se producen cambios hormonales que afectan a la próstata
- Los antecedentes familiares suponen un determinante claro
- Cambios en los niveles de testosterona